JUEGO
PC: TEST DRIVE
UNLIMITED (1 DVD)
El caso es que Test Drive Unlimited
empieza situándonos en un
aeropuerto con destino a Hawaii
y 200.000 dólares en el bolsillo.
Será en la cola de entrada
al avión cuando deberemos
escoger el personaje que nos acompañará
a la aventura, de entre un elenco
que recoge a varios hombres y mujeres.
Esta es una mera decisión
formal ya que no influirá
para nada en los acontecimientos
posteriores; pero lo remarcamos
porque ese será el último
contacto con lo que podría
ser el argumento de
una posible historia en el juego,
ya que por lo demás cualquier
tipo de unión entre los sucesos
posteriores brilla por su ausencia.
Una vez con coche y casa podremos
pasearnos por los más de
1500 kilómetros de carretera
que componen la isla y, os lo podemos
asegurar, aquí hay 1500 kilómetros
de los de verdad. Repartidos en
flamantes autopistas, serpenteantes
carreteras o en oscuras pistas de
montaña, la sensación
de enormidad de la isla es notoria,
dado que además disponemos
de un cuentakilómetros en
el coche que nos indica la distancia
real que hemos conducido.
Y básicamente, del mismo
modo que puede hacerse con GTA,
podemos movernos libremente por
todo el perímetro e ir aceptando
las misiones de todo tipo para ganar
más dinero (y comprar más
casas, coches, adquirir ropa, etc.)
o retar a cualquiera de los jugadores
que haya online y que veremos discurrir
a nuestro alrededor, mientras vamos
a toda velocidad con nuestro bólido
o simplemente nos limitamos a pasear
observando las, en ocasiones, maravillosas
vistas que nos ofrece este Unlimited.
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Los efectos de sonido están
bien conseguidos, con grandes diferencias
dependiendo de las motorizaciones
que acompañen a nuestros
bólidos o motocicletas.
Por un lado comprobamos el nivel
de detalle y definición con
el que se han tratado los 90 vehículos
que podemos escoger en el juego,
y ciertamente están todas
las marcas clásicas y más
representativas del mercado. Los
coches están precisados al
milímetro y se le añaden
bonitos efectos de reflejos en las
carrocerías que quedan de
maravilla en los Ferrari, Lamborghini,
Aston Martin
o incluso en
los Volkswagen, todo sea dicho.
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