"Operation Flashpoint" fue creada por el grupo desarrollador Bohemia Interactive, pasando después a programar “ARMA” y dejando la licencia “Operation Flashpoint” a los grupos internos de Codemasters. ARMA se ha ganado a pulso el título de juego referencia en los simuladores de acción militar por sus grandes cualidades, lo inteligente de su desarrollado, un planteamiento serio y una jugabilidad pausada y creíble. Codemasters encargó a Codemasters Action Studio la realización de esta nueva entrega de la saga, después de un “Dragon Rising” en 2009 que no dejó muy contentos a los fieles seguidores del título. Con “Red River” intentan recuperar el trono que recogió ARMA y que con las nuevas características parece más cerca que nunca de volver a sus manos.
Para empezar, la historia y el desarrollo del argumento no son extraordinarios, pero el planteamiento base y el punto de partida nos ha parecido más trabajado: nos encontramos en 2013, en plena Asia Central, situados en Tayikistán. Un levantamiento insurgente hace temer por la soberanía del país y los modos en que esto puede afectar a sus vecinos: Afganistán, China y Uzbekistán. De un modo u otro, los actos terroristas del país afectan a los intereses de EE.UU. y de China, pero cada uno persigue unos intereses distintos. El ejército norteamericano pretende estabilizar la zona después de todo el despliegue efectuado en Afganistán, mientras China persigue que la revuelta no afecte a su región de Xinjiang. Nos encontramos con los dos ejércitos cruzando hacia el interior la frontera del país, en un espacio muy reducido y además efectuando operaciones de combate. Las confrontaciones son inevitables entre ellas, pero la calma tensa domina la situación en el momento en que entramos en acción.